Valor agregado en origen
Un proyecto para elaborar lecitina de soja en Cañada Seca.
En 2012, Eldo Filipuzzi, del CREA Cañada Seca, comenzó a operar una planta extrusadora de soja para diversificar los ingresos de la empresa agrícola. Ahora, su hija Leila quiere dar un paso más en el agregado de valor en origen al transformar gomas de aceite de soja (un subproducto sin valor) en lecitina de soja.
El proyecto de Leila, quien es microbióloga, obtuvo el segundo premio en la categoría “Emprendimiento en marcha” del programa Agroemprende 2017, organizado por los ministerios de Agroindustria y de Producción de la Nación en conjunto con la provincia de Buenos Aires.
“En los últimos años el auge de pequeñas plantas procesadoras de soja provocó que el subproducto gomas de soja sea un inconveniente económico y ecológico para la gran mayoría de las PyMEs extrusoras”, comenta Leila, quien está desarrollando el emprendimiento junto a su hermano Norberto (agrónomo) y Yoana Scrivanti (médica veterinaria).
El proyecto contempla inicialmente usar la goma de soja de la extrusora familiar para ajustar las técnicas de extracción y pureza del producto. Posteriormente, cuando se incorpore equipamiento para comenzar a producir lecitina a escala industrial (la meta es unos 1.500 kg por año), se requerirá recibir goma proveniente de otras extrusoras localizadas en la región.
“El crecimiento será paulatino y a partir del quinto año está previsto llegar a la madurez. El objetivo es alcanzar el punto de equilibrio a partir de sexto año”, explica Leila. “La lecitina tiene un mercado potencial importante como aditivo en productos de nutrición animal”, agrega.